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Residencia para Mayores Santa Ana - Málaga

Residencia de ancianos Santa Ana Málaga
presión arterial en personas mayores

Presión Arterial en Personas Mayores

presión arterial en personas mayores

Presión Arterial Correcta en Personas Mayores

Con el paso de los años, nuestro cuerpo experimenta una serie de cambios inevitables, y uno de los más comunes en la tercera edad es la hipertensión arterial. Esta condición, también conocida como presión arterial alta, afecta a aproximadamente 1280 millones de adultos entre 30 y 79 años en todo el mundo. Es fundamental saber detectar los síntomas a tiempo y medir cuál es la presión arterial correcta en personas mayores para llevar un seguimiento adecuado de esta enfermedad. Como es el caso de las personas que viven en nuestra residencia de ancianos en Málaga, Residencia Santa Ana.

La hipertensión en personas mayores suele deberse a la rigidez y pérdida de elasticidad en las arterias, lo que aumenta la resistencia al flujo sanguíneo. Esto obliga al corazón a bombear con más fuerza, aumentando el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. Por ello, es crucial controlar la presión arterial en personas mayores para prevenir complicaciones y mantener una vida saludable.

¿Qué es ser hipertenso?

La hipertensión arterial es una condición que afecta a más del 30% de la población adulta. Se define cuando la presión arterial es más alta de lo normal, lo que implica que el corazón tiene que trabajar más de lo habitual. Para comprender la hipertensión, es esencial conocer la medición de la presión arterial, que se expresa en dos números: la presión sistólica y la presión diastólica.

¿Cuál es la presión sistólica?

La presión sistólica es el número más alto y representa la presión en las arterias cuando el corazón late. Se considera que una persona tiene presión alta cuando la presión sistólica es de 140 mmHg o mayor.

¿Qué es la presión diastólica?

La presión diastólica es el número más bajo y representa la presión en las arterias cuando el corazón está en reposo entre los latidos. Se considera hipertensión cuando esta cifra es igual o mayor a 90 mmHg.

Identificar la hipertensión es vital, ya que muchas veces no presenta síntomas evidentes. Por ello, es importante medir la presión arterial regularmente y consultar a un médico si se detectan niveles altos de manera recurrente.

Presión Arterial en Personas Mayores: Tipos de Hipertensión

La hipertensión no es una condición única; existen diferentes tipos que pueden requerir enfoques distintos en su tratamiento.

  • Hipertensión primaria. La hipertensión primaria, también conocida como hipertensión esencial, representa el 90% de los casos. No tiene causas específicas identificables, aunque se asocia con factores genéticos y de estilo de vida, y tiende a manifestarse con la edad.
  • Hipertensión secundaria. La hipertensión secundaria es menos común, afectando entre el 5% y el 10% de los casos. Se origina a partir de condiciones médicas subyacentes o el uso de ciertos medicamentos. Puede mejorar una vez se identifica y trata la causa.

Síntomas de la Tensión Alta

Los síntomas de la tensión alta en ancianos pueden ser fácilmente confundidos con otras condiciones. Algunos de los síntomas más comunes incluyen:

  • Hormigueo en las extremidades
  • Vértigo
  • Confusión
  • Náuseas
  • Dolor de cabeza
  • Falta de aire
  • Cambios de visión
  • Sangrado nasal

Es crucial que, si se manifiestan estos síntomas, se mida la presión arterial para descartar hipertensión.

¿A qué hora es mejor tomar la tensión arterial?

Para obtener mediciones precisas de la presión arterial, se recomienda medirla en momentos de relajación. Lo ideal es hacerlo después de haber descansado al menos 5 minutos, sentado en una silla con los pies apoyados en el suelo. Se sugiere medir la presión en diferentes momentos del día, como por la mañana antes de desayunar, antes y después de hacer ejercicio, y antes de acostarse.

Causas de la Tensión Alta y Factores de Riesgo en Personas Mayores

La tensión alta puede ser provocada por múltiples factores, que incluyen:

  • Consumo excesivo de sal y grasas.
  • Enfermedades crónicas como diabetes y dislipidemia.
  • Apnea del sueño.
  • Obesidad.
  • Sedentarismo.
  • Tabaquismo y consumo excesivo de alcohol.

Identificar estos factores de riesgo es crucial para implementar cambios en el estilo de vida que ayuden a controlar la presión arterial.

¿Qué hacer cuando tienes la tensión alta?

La gestión de la hipertensión requiere un enfoque integral. Algunas recomendaciones incluyen:

  • Bajar de peso. Perder peso puede tener un impacto significativo en la presión arterial, especialmente en personas con sobrepeso.
  • Hacer ejercicio regularmente. La actividad física regular, como caminar, nadar o bailar, es esencial para controlar la presión arterial.
  • Tener una dieta saludable. Una dieta rica en frutas, verduras y baja en sodio es fundamental. El potasio, presente en muchos alimentos, ayuda a reducir los niveles de sodio en el cuerpo.
  • Reducir la sal. Disminuir el consumo de sal puede mejorar la salud cardiovascular. Leer las etiquetas de los alimentos y cocinar en casa son buenas prácticas para controlar la ingesta de sal.
  • Alimentos que bajan la tensión arterial alta. La dieta DASH (Enfoques Dietéticos para Detener la Hipertensión) es altamente recomendada. Se centra en una alimentación rica en frutas, verduras, productos lácteos bajos en grasa, legumbres y nueces, limitando el consumo de carne roja y azúcares.

Conclusión

La hipertensión es un problema frecuente en la vejez, afectando a dos de cada tres personas mayores de 70 años. La reducción de la presión arterial por debajo de 140/90 mmHg es recomendable en personas mayores de 65 años. Sin embargo, es esencial realizar controles regulares y adaptar los tratamientos a las necesidades específicas de cada individuo.

Desde Residencia Santa Ana, promovemos la importancia del bienestar y la salud en las personas mayores. Mantener un control constante de la presión arterial y adoptar un estilo de vida saludable es clave para prevenir complicaciones y mejorar la calidad de vida en esta etapa. Cuidarse es una prioridad en todas las edades, pero en la vejez, se vuelve más crucial que nunca. Si su ser querido requiere los cuidados personalizados de Residencia Santa Ana, consulte los precios residencias de ancianos en Málaga para saber si puede acceder a una plaza. También le recordamos que disponemos de plazas concertadas y vinculadas al servicio.